sábado, 12 de septiembre de 2009

Para quienes no saben como murio Chacumbele...

Como la mujer de fuego
Oh mujer de cabaret
Vas en busca de tu amante
Que ayer noche se te fue.

Yo no puedo detenerte
Por qué llamar la atención
Tengo ganas de prenderte
Sin poner mi corazón

Parrandiando por las calles
De La Habana noche y día
No te acuerdas caramba
Refunfuñando que ayer noche se mató

Chacumbele que ya estaba aburrido de sufrir
El mismito se mató

Pobrecito Chacumbele él mismito se mató
Él mismito se mató.

jueves, 10 de septiembre de 2009

Del por que no juego Street Fighter ni Pole Position en PS3*

En Venezuela, existe un gran auge de los juegos de video como en casi todo el mundo. La Xbox en todas sus versiones, el Play Station o el Wii, son la delicia de grandes y chicos en general. Pero a mí no me llaman la atención, especialmente los juegos de manejar, fíjense porque: Al manejar en Caracas, debes estar pendiente de:
1.- Los huecos en la vía. Mas allá de dañarse un amortiguador (en cuyo caso deberás cambiar el par) algunos huecos pueden dejar medio carro adentro. Lo certifico
2.- Los motorizados. Estos ejemplares se dividen en dos amenazas; los que manejan mal y podrían echarte la moto encima ocasionando un accidente, o los amigos de lo ajeno que están esperando para robarte según lo que puedan ver. Por eso, tienes que usar frecuentemente todos los espejos a ver por donde te viene el sujeto en dos ruedas…
3.- Los autobuseros. Usualmente, tienen varios conceptos errados. El primero es que creen que dentro de la unidad llevan cochinos, no tienen respeto por los pasajeros. El segundo es que, paradójicamente, piensan que manejan un escarabajo blindado, porque tiran ese vehículo de un lado a otro sin miramientos… en cualquier caso es bueno que sepas que el autobusero jamás te dará paso.
4.- Los peatones. No existe mayor consciencia ciudadana sobre cuáles son los deberes de los ciudadanos. Por eso, aquí cualquiera se tira al medio de la calle intempestivamente para llegar al otro lado, o simplemente porque se le cayó un lente de contacto. Ojo con eso.
5.- Las gandolas/camiones de carga. Caso parecido a los autobuseros salvo porque la carga es inanimada.
6.- Buhoneros, recogelatas y mendigos en general: en esta categoría suceden varias cosas, desde resultar robado, hasta que daños en el vehículo por oponerse a comprar un cocosete, el último video de Miguel Moly con Diveana o un cargador chino para BlackBerry.
7.- Los taxistas. Este es un gremio perdido. La ley no existe para ellos, quienes intrínsecamente hicieron una adaptación del rey sol, Luis XiV: la rue est moi (la vía soy yo)
8.- El conductor imprudente. Similar a los peatones, este sujeto no tiene el más mínimo respeto por los derechos ajenos. No usa las luces del vehículo, no respeta las señales de tránsito, piensa que las vías son una pista de Indi500… en fin un peligro por sí mismo
9.- Los servicios públicos. Nunca se enterará que van a reasfaltar una vía, modificar un tubo, o cambiar una estación de electricidad, hasta que la cola por los trabajos en la vía lo retrasen de su rutina de transporte. Esto claro haciendo especial énfasis en la instalación de policías acostados.
Como verán, todos estos obstáculos deben ser superados por cualquier conductor en Caracas, en un día normal, en un recorrido habitual a su trabajo, su centro de estudios o sencillamente el supermercado. ¿Para que necesito jugar, teniendo TANTA diversión en mi realidad no virtual?

viernes, 4 de septiembre de 2009

Desidia

Oficialmente, mantengo mi desidia.

No niego que en algún momento sentí vergüenza por ello… pero como muchas cosas se asumen, yo asumo la desidia que sostengo con respecto a lo que pasa en mi país. No creo que pueda conseguirse un cambio real, mientras yo me siente a tocar cacerolas en la esquina de mi casa, que es una calle ciega. Ni parándome en alguna plaza de La Castellana que es una zona totalmente rosa.
No tiene ningún sentido convencer a los que ya están convencidos!
Y no estoy dispuesta a convencer a los que no convencidos pueden tener metodos menos ortodoxos de someterme a mi a su ideología.
Así pues, lo oficializo. No voy a marchas, no me visto de ningún color, no pongo ningún símbolo en ningún nick. Me limito a votar y a resguardarme en mi casa cuando las nubes cambian de gris a negro…
Espero que algún día me perdones, Venezuela…

y tu eres el número:

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