sábado, 29 de octubre de 2011

Uso mi comodín: habla la audiencia


Hace unos días salí con un amigo de vieja data, de esos que pese a que poco los ves son buenos amigos. Nos estuvimos como actualizando en la vida del otro, y él me echó un cuento que lo comparto porque no lo entendí:
“Treme, me estoy divorciando de meloncito, por muchas cosas… pero lo peor es que descubrí que pasó dos años de nuestro matrimonio montándome cachos! Mientras yo creía que ella cantaba el Ave María, en realidad estaba cantando otra cosa con diferente micrófono…. Los domingo a veces salimos a comer, me da cosita que está sola. A veces me quedo cuidando a mi lechuguita (el retoño de ambos) para que ella rehaga su vida… en vacaciones nos fuimos hasta con los padrinos de lechuguita a ver al ratón ese que todos aman…”
Honestamente, yo quedé como Pocoyó (una vez más). Por qué si mi pareja me traicionó durante la mitad de los años que estuvimos casados, yo ahora quiero ser la persona más considerada del planeta para que ella rehaga su vida?
En mi opinión, este cuento tiene partes chucutas… o contadas a discreción. Ustedes que opinan?

Suéltate el pelo y mírate en el espejo


Gaby es la princesa de su mamá, de su abuela y hasta de su bisabuela. Realmente es una niña preciosa, en todos los sentidos. Es trabajadora, es responsable y tiene 23 años. El problema es, que ella no tiene ni idea de lo valiosa que es.
La Princess se casó hace tres años con un ejemplar de la vida, de esos que sirven para oírles los cuentos; pero sólo eso! Empeñada en que su amor por ella lo haría cambiar. Han pasado 7 años y el sigue viendo si puede llevarse a la cama hasta a las monjitas del colegio donde estudió primaria.
Peor aun, él es un infiel confeso. “Yo voy a cambiar Princess, te lo prometo”. Eso lo ha oído Gaby en reggeaton, en bachata, en merengue y hasta en salsa cabilla. Y nunca pasa. Pedro siempre vuelve a sus andadas.
“Lo voy a amenazar con divorcio”. COÑO! Ahora sí la vas a regar. A la gente no se le amenaza, porque se le pone en sobreaviso; se hace lo que se va a hacer y punto. Además, al no cumplir tu palabra, Pedro sabrá perfectamente que está más cómodo que el que te conté en Miraflores. No lo saca nadie.
Este cuento es relativamente común: una mujer campana* acompañada de un cenicero de moto (pregúntense ustedes para qué sirve un cenicero en una moto) “Doñita, es que tengo miedo a quedar sola”. Muchacha! Tienes 23 años, la vida entera te está esperando! Mira a la Duquesa de Alba y a Zsa Zsa Gabor! Ahora es cuando hay candidatos para ti en esta vida. Si algo me ha enseñado el pasado, es que a veces es mejor seguir a pie que montada en el autobús de la infelicidad. Total, siempre viene otro autobús detrás.
Yo no sé que nos pasa en algún momento de nuestra vida, que nos aferramos al carcaman que tenemos a nuestro lado como si fuese la cura del cáncer. Mujeres, hay que quererse! Si nosotras no asumimos el valor que realmente tenemos, como esperan que venga un extraño a tasar nuestro valor? Faux pas.
Espero que mi amiguita Gaby abra sus ojos y se de cuenta de qué es lo que debe hacer si realmente quiere ser feliz.

domingo, 16 de octubre de 2011

Mi vida NO es tan sensacional...


Que me disculpe Daniel Sarcos… yo sé que ese nombre le pertenece a su stand up, pero a veces hay personas que compartimos la singularidad en el estilo de vida.
Como yo nunca tengo suficiente entretenimiento, me toca mudarme con mis lovebirds (cucú y Muñeca). Primero, pensé seriamente en dejarlos solos con su tren de ayudantes, pero la verdad le logré conseguir solución a eso y me agrada disfrutarlos aunque a veces los quiera estrangular y hacer un lazo con sus dos cabezas.  Al final del día, no tengo nada más mío que ellos…
El caso es, que buscar vivienda con esta maternidad es toda una proeza. Porque por otro lado el resto de las actividades sigue su curso, así que hay que hacer todo lo demás, más buscar residencia. Mi problema aquí, es Muñeca.
Vivir en una casa da muchas comodidades… y malas costumbres. Ir a un apartamento es como un despido indirecto, como si te bajaran el sueldo. Es incómodo reducirse, y aprender a vivir con todos los ruidos normales que general los apartamentos vecinos… eso, sin sumar el plus de una construcción infeliz que lleva 9 meses haciéndome la vida de cuadritos.
Volvamos al proyecto mudanza, o compra de vivienda. “Quiero un apartamento que tenga un desahogo”. Será un apto que venga con más desagües? “Una terraza o un balcón”. No comprendo para qué si el 70% de su tiempo está en su cuarto y el otro 30% está en la cocina.
“Qué los closets y los cuartos sean grandes”. Coño! Tienes 80 años. Más temprano que tarde vivirás en una caja donde sólo habrá lo que tengas puesto! Por qué quieres el walk-in closet de Sara Jessica Parker? 
“Quiero que la cocina esté nuevecita, que no haya que hacerle nada, de granito, mejor si es italiana”. Francamente, lo que es la gente: la cocina de mi casa tenía aproximadamente 45 años, era de fórmica y con la combinación de colores más atroz del universo. Y ahí vivió 35 años (dícese que esa cocina se la trajo de su otra casa anterior). Ahora tiene que tener la cocina de Sumito Estévez.
“Si no tiene baños remodelados, ni me lleves”. Nuevamente, PLOP! Los baños de mi casa eran setentosos mal… rosado, azul, amarillo, verde… parecía que uno se había metido sus respectivas pastillitas de LSD antes de entrar. Ahora queremos mármol… esta señora parece roja, rojita.
“Quiero unas áreas comunes donde Cucú pueda salir a caminar, aun si cae el diluvio universal. Es más, que pueda entrenar para el maratón de NYC.”Papá con esfuerzo, caminará 15 minutos diarios, a una velocidad como de 100 metros por hora. Period.
“Yo no puedo vivir en el inframundo, soy una persona mayor… Que quede cerca de todo: del médico, del carnicero, del pedicurista, del sacerdote, del maestro de feng shui…” La verdad, ya ni pierdo mi tiempo pensando en dónde puede ubicarse ese lugar.
Y la mejor de todas las partes: “que yo lo pueda pagar” Hello Nena, wake up and smell the coffee! No vendimos Buckingham Palace, fue the Haunted Mansion! Y a mi edad y en mi estado, no estoy como para prostituirme por dinero, no hay quien pague por este cuerpo decadente, jajajajajaja.
Así NO se puede hacer cine!

lunes, 10 de octubre de 2011

Llamadas de celular

Hace unas semanas vi una película llamada "amigos con beneficios", donde el protagonista se solidariza en algún momento de la trama con la enfermedad de alzheimer de su padre, y se quita los pantalones en un restaurante; como suele hacer su papá.
Hoy, mi papá me llamó por el celular... yo le atendí y conversamos como 5 minutos. El único detalle es que estábamos sentados uno al lado del otro, en la cocina de la casa.
Qué raras formas de manifestación tiene el amor, de vez en cuando.

y tu eres el número:

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