Antes de empezar, quiero expresar mis sinceras disculpas por hablar en tercera persona, como si yo no fuese venezolana. Pero no estoy dentro del grupo que voy a describir...
El venezolano tiene la mala costumbre de ver como le saca brillo a una bola de billar. Siempre quiere ser el "tío Conejo" del cuento, el que todas las gana con algún tipo de astucia. Pero esta vez, le salió el tiro por la culata.
La esposa de Juan José trabaja en una compañía de frutas desde hace casi 10 años. No es groseramente inteligente, pero es muy eficiente, por lo que se ha ganado el respeto y el aprecio de sus jefes. Nelly, la esposa de Juan José, se encarga de las compras de la compañía.
Juan José y Nelly viven en modo "vivienda multifamiliar": en la casa de los padres de Juan José. Tienen un hijo, Vicente, que acaba de nacer hace apenas un año.
Nelly quiere a su suegra, pero quiere su casa, por aquello de "el casado casa quiere". Como Juan José no se mata trabajando, pues Nelly sabe que de ella depende el tema de la mudanza.
A pesar de vivir al lado de su trabajo, a Nelly le salió una oportunidad: pagar treinta mil bolívares fuertes por aparecer en los listados de damnificada del gobierno, y de esta forma obtener una propiedad en las cercanías del Valle de Sartenejas.
Nelly, quien debe hasta el modo de caminar en las tarjetas de crédito rompió hasta el cochinito de Vicente, y reunió los treinta mil bolívares. Y se los dio a la persona contacto de la operación. Rápidamente Nelly apareció en cuanto listado de asambleas, reuniones y damnificados existia, firmando lo infirmable, más que Shakira en rueda de prensa... y consiguió la ASIGNACION de su apartamento.
Lo que no sabía Nelly es que ese apartamento jamás sera suyo! Es un apartamento "asignado", no tiene título de propiedad. Y Nelly apenas lo recibió se presentó con obrero en una mano y constructor en la otra: baños, cocina, pisos... Todo de paquete.
Sin ánimo de sonar peyorativa, qué clase de vecinos podía esperar Nelly? Menuda sorpresa se llevaron Nelly y Juan José en su primera semana en el apartamento!!!!! Sus vecinos pasan el día allí, sin trabajar... peleándose unos con otros... dando rondas en motocicletas... ingiriendo bebidas espirituosas mientras oyen reggaeton... La pobre Nelly pensaba que era el infierno en la tierra.
Su única opción, es vender. Pero, a quién? Esa propiedad sigue siendo del estado.
Lo barato sale caro...
El venezolano tiene la mala costumbre de ver como le saca brillo a una bola de billar. Siempre quiere ser el "tío Conejo" del cuento, el que todas las gana con algún tipo de astucia. Pero esta vez, le salió el tiro por la culata.
La esposa de Juan José trabaja en una compañía de frutas desde hace casi 10 años. No es groseramente inteligente, pero es muy eficiente, por lo que se ha ganado el respeto y el aprecio de sus jefes. Nelly, la esposa de Juan José, se encarga de las compras de la compañía.
Juan José y Nelly viven en modo "vivienda multifamiliar": en la casa de los padres de Juan José. Tienen un hijo, Vicente, que acaba de nacer hace apenas un año.
Nelly quiere a su suegra, pero quiere su casa, por aquello de "el casado casa quiere". Como Juan José no se mata trabajando, pues Nelly sabe que de ella depende el tema de la mudanza.
A pesar de vivir al lado de su trabajo, a Nelly le salió una oportunidad: pagar treinta mil bolívares fuertes por aparecer en los listados de damnificada del gobierno, y de esta forma obtener una propiedad en las cercanías del Valle de Sartenejas.
Nelly, quien debe hasta el modo de caminar en las tarjetas de crédito rompió hasta el cochinito de Vicente, y reunió los treinta mil bolívares. Y se los dio a la persona contacto de la operación. Rápidamente Nelly apareció en cuanto listado de asambleas, reuniones y damnificados existia, firmando lo infirmable, más que Shakira en rueda de prensa... y consiguió la ASIGNACION de su apartamento.
Lo que no sabía Nelly es que ese apartamento jamás sera suyo! Es un apartamento "asignado", no tiene título de propiedad. Y Nelly apenas lo recibió se presentó con obrero en una mano y constructor en la otra: baños, cocina, pisos... Todo de paquete.
Sin ánimo de sonar peyorativa, qué clase de vecinos podía esperar Nelly? Menuda sorpresa se llevaron Nelly y Juan José en su primera semana en el apartamento!!!!! Sus vecinos pasan el día allí, sin trabajar... peleándose unos con otros... dando rondas en motocicletas... ingiriendo bebidas espirituosas mientras oyen reggaeton... La pobre Nelly pensaba que era el infierno en la tierra.
Su única opción, es vender. Pero, a quién? Esa propiedad sigue siendo del estado.
Lo barato sale caro...
1 comentario:
Y bien hecho por vendida!!!!
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