martes, 18 de enero de 2011

Gracias amiga!


Llegó la hora de despedirnos. Hasta el día de hoy, eres el único lugar que reconozco como mi hogar. Y aunque sé que el hogar lo hacen las personas, pues también sé que ese está golpeado por las cosas de la vida.
Hoy recordé tantas cosas, la verdad aunque esto algún día tenía que pasar, no me lo imaginaba así. Ha sido duro y rudo el desempolvar tantos recuerdos y decidir si deben ser vendidos, regalados o botados, tantas cosas que nos han hecho reir y llorar...
Es tiempo ya de darnos un nuevo aire. Tú, con nuevos habitantes y su historia, y yo con nueva amiga y la interacción que desarrollemos.
A pesar que lo único seguro que tenemos es el cambio, cómo cuesta adaptarse al mismo.
Gracias por tantos años de anécdotas, albergándonos del frío y del calor. Trataré de no extrañarte, sino de recordarte con cariño.
Ojalá tus nuevos habitantes sean tan felices como pudimos serlo nostros aquí.
Buena suerte! También a ti te hará falta...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ojala que a donde vaya ahora, le llene igual de cosas buenas y bonitas..los recuerdos siempre son parte de nuestro presente. La vida sigue y hay que adaptarse.

Un beso.

P.

y tu eres el número:

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