sábado, 19 de noviembre de 2011

El mono, el garrote y el estado

Ayer había una discusión en una red social sobre la gente que se pasa las luces de los semáforos. El que inició el debate, un oficialista confeso y profeso, mantenía que la culpa es de la educación familiar, "en el hogar se imparten los buenos modales, los principios".
Por otro lado, había una señora diciendo: "no, la culpa es de este gobierno infeliz que no hace nada!"
En alguna medida, ambos tenían razón. Dice un conocido refrá popular: "la culpa no es del mono, sino de quién le da el garrote". El hogar es el primer centro de formación ciudadana, lingüistica, moral, cívico... es en la casa donde te dicen "mijo, no se habla con la boca llena", "respete que estan hablando los mayores", "haya, halla y allá son tres cosas diferente, vaya y busque el diccionario, caramba!". Es en el hogar donde nos hacen devolver el lápiz de hello kitty que me dio mi amiga Susanita sin pedirle permiso a su mamá, donde aprendemos a no botar papeles por la venta del carro, etc... Aunque eso no ocurre en todas las casas.
Después viene el colegio. Si nuestros padres no tenían tiempo, no podían enseñarnos, o simplemente no les dio la gana; viene el alma mater primaria a enseñarnos a leer, a escribir, a sumar y restar, etc...y aprendemos por imitación de nuestro entorno de forma subyacente.
y finalmente, es el momento de la intervención del Estado. Cuando el hogar y la escula no dieron fruto, es el deber del papá estado de poner orden en la pea. Bien sea a través de multas, o sanciones mayores dependiendo de la magnitud de la falta. 
"Y por qué los venezolanos cuando llegan a Mayami se comportan, y aquí viven en anarquía?" Simple, por temor al castigo.
Yo en lo particular no creo que sea represión, creo que es el deber del estado mantener el orden en busca del progreso. Porque cuando el estado es perezoso y no se preocupa por sancionar las malas acciones, los ciudadanos se relajan, y asumen que todo es un dejar hacer, dejar pasar. Total, no hay castigo para ningun crimen.
Por lo tanto, si bien el amigo rojito tiene razón en que su mamá debió darle un pellizco, la señora azulita tiene razón en que a falta de padres siempre es bueno tener un padrino que te de tu coquito.Y el nombre del padrino al final, siempre debe ser Estado.

1 comentario:

Chemi dijo...

Pasarse un semáforo en rojo es más que todo cuestión de seguridad, la educación que aplica allí es la de la calle, para sobrevivir. Y el estado no hace nada para que uno pueda esperar tranquilamente la luz verde.

Y lo otro, es que aquí reina la impunidad. Como dice en wikipedia "Impunidad es una excepción de castigo o escape de la multa que implica una falta o delito"

Se dice que no somos suizos. Pero no es solo eso, lo que pasa es que no estamos en suiza! Ademas de lo que dice Doña Treme, he conocido a más de un nórdico que al tiempo de estar en Venezuela aprende rápido a faltar las leyes, por que se da cuenta que no hay quién haga algo si no las cumple!

He dicho

y tu eres el número:

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