sábado, 9 de julio de 2011

El silencio de los NO inocentes


Hace unos días mi amiga carito escribió sobre la autocensura, y luego leí en el blog de Toto @odioamishijos; que dejó como saldo la cuenta @momentosHerodes... La verdad es, que al final del día todos callamos verdades.
A veces lo hacemos por no ofender, a veces por no herir, a veces porque no seremos entendidos, a veces para protegernos de la envidia ajena... Pero siempre callamos cosas! Una mamá jamás le dirá a un hijo cuando realmente quiere matarlo, yo nunca le diré a mi madre las cosas que me hacen querer estrangularla con mis propias manos; y creo que el motivo principal de esos silencios es porque son momentos. Es decir, ni yo quiero matar a mi mamá, ni ninguna madre normal quiere matar a sus hijos... Simplemente somos humanos.
Respecto al que nos entiendan o no, eso es como las manzanas gala: es lo mismo pero diferente. Sí, muchas veces somos malentendidos por la gente que nos rodea, incluso gente muy cercana a nosotros mismos... pero es tan difícil (por no decir imposible) ponerse en los zapatos del otro! Cuántas veces hemos oído la frase: "si yo fuese tu haría..." Es correcto. Si tu fueses yo, pero como no lo eres, dejemos la sugerencia en eso, una sugerencia y no un comando.
Hay verdades que son políticamente incorrectas! Aunque sea tu morocho, simplemente hay cosas que jamás serán dichas y todos viviremos en paz hasta que la muerte nos separe. Por qué? Porque no hay beneficio en esa verdad, simplemente ocasionara una herida en la otra persona que es como un clavo en una puerta; puedes sacarlo, pero la marca siempre quedará allí.
Quizás las verdades más fáciles de ocultar son la relativas a la envidia. "Nadie quiere ver ojos bonitos en cara ajena" . Decía mi abuelita. Y es verdad, con o sin mala intención, es más común de lo que se cree que los planes resulten dañados por exceso de información a terceros. La energía existe y fluye. Así que quédese como en misa mientras se le concreta su plan.
El silencio no es tan malo... especialmente cuando evita hacerle daño a los demás... aunque no seamos inocentes de nuestra forma de pensar.

2 comentarios:

Ira Vergani dijo...

Sin embargo, estoy convencida que hay verdades que deben ser dichas para sacarlas de nuestro sistema y evitar que nos den infartos...lo que tenemos que hacer es buscar la forma o el momento de decirlas sin causar daños colaterales, lo que puede implicar drenarlas en terapia, con unos dardos, con el anonimato, etc etc etc

Magally Arias dijo...

Estoy totalmente de acuerdo con el comentario anterior!

y tu eres el número:

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