La semana pasada me llamaron de Aldeas Infantiles SOS para confirmar mis datos, puesto que yo colaboro con esa institución. Mi mamá estaba a mi lado y puso cara de Pocoyo: "tu colaboras con una causa caritativa? No lo sabía!"
Hoy, hablando con un viejo amigo, él me preguntó: "qué estás leyendo?" Yo le respondí que un libro sobre cómo afrontar los problemas cristianamente. Me respondió "no te imaginaba tan católica, te creía más pragmática".
Si algo me quedó del sermón dominical, es que me agrada que mi mano derecha nunca sabe lo que hace la izquierda. La caridad no se hace para ser reconocida, ni la fe tiene que publicarse en el facebook para ser genuina.
Ojo con los prejucios... aun viviendo bajo el mismo techo nunca conocemos totalmente a las personas que nos rodean
1 comentario:
“Las personas pueden olvidar lo que les dijiste, las personas pueden olvidar lo que les hiciste, pero las personas nunca olvidarán cómo las hiciste sentir”.
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